/ |
|
|
DIRECTORIO de la SECCIÓN |
EL TRONCO LINGÜÍSTICO INDOEUROPEO |
Los documentos a los que desde aquí se accede han sido realizados expresamente para desarrollar los programas académicos que trabajamos con nuestros alumnos. También está disponible una estructura tipo «Wiki» colaborativa, abierta a cualquier docente o alumno que quiera participar en ella. Para acceder a estos contenidos se debe utilizar el «DIRECTORIO de la SECCIÓN». Para otras áreas de conocimiento u opciones use el botón: «Navegar» |
origen y difusión |
Durante el siglo XVIII, misioneros franceses desplazados
hasta la India, aprecian por primera vez ciertas relaciones entre el sánscrito,
el latín, el griego, el alemán y el ruso. Posteriormente, el filólogo inglés
William Jones, inicia la teoría «indoeuropea» que admite la existencia de un
ancestro en común para el sánscrito, el latín, el griego, el persa y ciertas
hablas arcaicas del Turquestán chino, a las que podrían unirse, también, las
lenguas celtas y el gótico germánico.
El estudio comparado que le sigue no permite deducir la
responsabilidad en ello de una raza ni de un Estado únicos, pero las afinidades
apuntan a coincidencias importantes habidas en ciertos momentos de la historia
entre sociedades y pueblos europeos e iranios modernos. Actualmente se supone
que la familia lingüística indoeuropea, con su variedad de ramas y millones de
hablantes, se ha desarrollado a partir de una única lengua usada hace miles de
años por un grupo relativamente pequeño de personas, a quien por conveniencia se
denomina indoeuropeo, localizado en una zona geográfica relativamente pequeña.
El término indoeuropeo se aplica exclusivamente a la
lengua. No hace referencia alguna a raza o cultura. Hoy se consideran hablantes
nativos de lenguas indoeuropeas a grupos humanos indios, afganos, iraníes,
griegos, irlandeses, rusos, mexicanos, brasileños y noruegos.
La idea tradicional visualiza al indoeuropeo inicial
como un pueblo nómada que accede a las comarcas vecinas escasamente pobladas y
habitadas por cazadores o recolectores, introduciendo allí las habilidades
agrícolas y sus usos lingüísticos.
Su expansión se data entre los 7000 y los 4000 años a.C.
Es evidente que los indoeuropeos no habitaban en ninguno de los avanzados
centros culturales del mundo antiguo como el valle del Nilo, Mesopotamia, o las
llanuras del Indo. Las antiguas inscripciones jeroglíficas egipcias no tienen
origen indoeuropeo. Los elementos indoeuropeos se extienden por estas áreas por
la presencia de intrusos procedentes del exterior. Solo alrededor del año 1500
a.C. aparece en las márgenes de Mesopotamia una dinastía con nombres
indoeuropeos que gobierna sobre un pueblo de lengua no indoeuropea, los Mitanni,
que vive en el alto Éufrates. Por ese tiempo en Anatolia se habla el hitita, y
los arios, cuya lengua pertenece a la rama indo-irania, ya están en el noroeste
de la India, como muestran los vedas, sus textos más antiguos.
Son varias las localizaciones que se han dado para su
centro de nacimiento y difusión. La hipótesis de Marija Gimbutas lo atribuye a
los curganes, una vieja civilización seminómada familiarizada con los caballos,
que se expande desde sus tierras originales, en las estepas pónticas al norte
del Mar Negro, por buena parte de Europa y el sur de Asia, llevando consigo su
idioma.
Paul Petit secuencia su expansión de este modo: En un
primer movimiento a través de la Tracia, Iliria y el Danubio, se expande hacia
el sur y el oeste. Los italoceltas se extienden por la llanura del Po, por
Europa Central y la Galia. Mientras, los jonios descienden hacia Tesalia, Grecia
y el Peloponeso, desde donde se lanzan sobre Creta.
En un segundo momento, también desde Tracia pero por el
Bósforo y las llanuras del sur del
Cáucaso, los indoiranios se dirigen hacia el sur y el este, hasta la Bactrian y
el Indo, antepasados de los medos y los persas de la época clásica.
Finalmente, después de franquear el Bósforo, los hititas
se establecen en el corazón de Asia Menor y, quebrantando a su paso a los
asiáticos, desencadenan en Mesopotamia la invasión de los casitas y en Egipto la
de los hicsos.
En Europa no se cuenta con textos muy antiguos de tipo
indoeuropeo, a excepción de los griegos. El descifrado del Lineal B minoico
revela que en Creta y en Grecia continental, se usa hacia 1400 a.C. una forma de
griego micénico.
Los textos de lenguas itálicas son posteriores. Se datan
en torno al siglo VI a.C.
Los de habla celta aparecen en la región de los Alpes a
partir del siglo V a.C., y los germánicos, que habitaban al este del Rin y en
Escandinavia, son mencionados por primera vez por autores griegos y romanos en
el siglo I a.C., siendo sus registros más antiguos inscripciones en alfabeto
rúnico.
Los primeros textos escritos que se poseen en lenguas
indoeuropeas muestran ya una notable separación entre unas y otras, por lo que
se puede afirmar que esa divergencia debió comenzar en el III milenio a.C.
El análisis del vocabulario común de las diferentes
ramas nacidas del tronco lingüístico común, se confirma que los indoeuropeos,
antes de su dispersión, eran un pueblo de pastores nómadas o seminómadas, con
una economía centrada en la ganadería vacuna y ovina, y que cuidan, además,
animales domésticos como perros y cerdos. Sin embargo, no hay palabra común para
asnos ni camellos. Sí las hay para caballos y vehículos de tiro, el grano, su
cultivo, sus aperos y herramientas, y la alfarería.
Gentes de interior, nombran ríos y arroyos, pero no el
mar, y dan mucha importancia a la familia, que se intuye patriarcal, y a los
dioses, entre los que destaca el del cielo: el Zeus griego y el sánscrito Dyaus.
ADEMÁS |
Responsables últimos de este proyecto Antonio García Megía y María Dolores Mira y Gómez de Mercado Son: Maestros - Diplomados en Geografía e Historia - Licenciados en Flosofía y Letras - Doctores en Filología Hispánica |
Apunte estadístico Portal activo desde abril de 2004. Los auditores de seguimiento que contabilizan las visitas desde esa fecha acreditan una suma entre 4.000 y 10.000 visualizaciones diarias para el conjunto de secciones que lo integran. Las visitas en el servidor «https» son privadas y no quedan reflejadas en los contadores visibles |
|